Buenas prácticas de gestión

Publicaciones de Carlos Álvarez Igarzábal

Artículos publicados por Carlos Álvarez Igarzábal

La inteligencia no depende de la cantidad de materia gris.

3/4/2006 – estudio en EE.UU

Lo que hace al ser inteligente.

El cerebro de la gente inteligente tiende a desarrollarse a una tasa diferente que los demás, indica un estudio en Estados Unidos (+ disincronía).

Se pensaba que la base de la inteligencia era la cantidad de materia gris en el cerebro (específicamente su espesor).

Según la investigación, publicada en la revista Nature, la gente es más inteligente porque su cerebro se ha desarrollado de forma diferente.

La investigación sugiere que los niños más inteligentes no son más listos solamente porque tienen más o menos materia gris en cualquier etapa de su vida.

El coeficiente intelectual, dicen, está relacionado con la dinámica de la maduración de la corteza cerebral.

Pero tal como dijo a BBC Mundo el doctor Luciano Basauri, neurocirujano del Centro de Exploración del Cerebro en Chile, «no se debe asumir que la masa de la corteza es el único factor que influye en la inteligencia».

«El entrenamiento precoz también tiene mucho que ver en el desarrollo del cerebro», señala el experto «así que no hay una sola causa-efecto de la inteligencia».

ENGROSAMIENTO DE LA CORTEZA CEREBRAL

El estudio, llevado a cabo por el Instituto Nacional de Salud Mental de Estados Unidos, utilizó escáneres para estudiar el desarrollo de la corteza cerebral en 307 niños.

La corteza es la capa más superficial del cerebro que contiene la materia gris y que es responsable del pensamiento.

Los investigadores descubrieron que los niños más listos tenían una corteza más delgada a los 7 años de edad[1], pero ésta tendía a engrosar rápidamente para cuando cumplían 12 años[2].

Los niños de inteligencia promedio tenían inicialmente una corteza gruesa que dejaba de aumentar de espesor a los ocho años.

En ambos casos, la corteza adelgazaba después de alcanzar su espesor final.

Pero ese crecimiento era más gradual en los niños con coeficiente intelectual (CI) promedio ya que la corteza alcanzaba su espesor final a una edad más temprana.

Los investigadores creen que el período de engrosamiento más extendido durante los primeros años de vida podría dar al cerebro más tiempo para desarrollar una red de circuitos cerebrales de pensamiento de alto nivel.

Y el rápido adelgazamiento de la corteza posteriormente podría deberse a que las conexiones neurales no usadas se marchitan a medida que el cerebro da prioridad a sus operaciones.

«Estudios del cerebro nos han enseñado que la gente con más alto CI, no tienen cerebros más grandes», señala uno de los investigadores, el doctor Elías Zerhouni.

«Gracias a la tecnología computarizada para obtener imágenes del cerebro, ahora podemos ver que la diferencia podría estar en la forma como se desarrolla el cerebro», indica.

Pero según el doctor Luciano Basauri, del Centro de Exploración del Cerebro, «el grosor de la corteza probablemente puede indicar un mayor número de neuronas, pero en la corteza también hay una serie de tejidos que no tienen potencial de entrenamiento«.

«Este estudio está hablando de la masa y el grosor de la corteza, pero no analiza la funcionalidad de los tejidos, la cual es algo que también debe tomarse en cuenta», señala el experto.

ESTIMULO PRECOZ

Los investigadores estadounidenses están ahora buscando las variaciones genéticas que podrían estar relacionadas a las diferentes tasas de maduración del cerebro.

El estímulo precoz y la interacción del medio ambiente son fundamentales en el desarrollo del cerebro dijo el Dr. Luciano Basauri, neurocirujano.

Hasta ahora se pensaba que las variaciones en la inteligencia general podían depender en gran medida en las diferencias genéticas.

Pero los expertos advierten que es peligroso asumir que los cambios por el desarrollo de la estructura cerebral están determinados por los genes del individuo.

Se debe tener cuidado con esa conclusión, señala Luciano Basauri.

«El estímulo precoz y la interacción del medio ambiente son fundamentales en el desarrollo del cerebro», dice.

«Y la prueba está en los países que tienen un buen sistema de educación diferenciada y entrenamiento cerebral, donde los promedios de CI son mayores que donde existe un sistema de educación indiferenciada», concluye el neurocirujano. Efecto Flynn, .

http://www.elcomercio.com/tendencias/salud/revelan-que-coeficiente-intelectual-depende.html.

El coeficiente intelectual (CI) de una persona está relacionado con el grosor de su corteza cerebral, así lo reveló este lunes una investigación en la que participaron varios centros de España, Reino Unido, EEUU y Canadá. Según el investigador Miguel Burgaleta, del grupo de Adquisición del Lenguaje y Percepción de la Universidad Pompeu Fabra la corteza cerebral es una capa delgada de células nerviosas, de pocos milímetros de espesor, que interviene en funciones cognitivas como la percepción, el lenguaje, la memoria o la conciencia. El estudio, que analizó a 188 niños y adolescentes durante dos años con intervención de investigadores españoles, ingleses, estadounidenses y canadienses y cuyo resultado publica hoy la revista NeuroImage, indica que la tasa de variación del grosor del córtex cerebral «es relevante«. Según Burgaleta, la investigación significa «un cambio de paradigma en el estudio de las capacidades cognitivas y contribuye a entender el aspecto dinámico y plástico del cerebro y, por tanto, de las capacidades cognitivas de los humanos». La corteza cerebral se va reduciendo a partir de los cinco o los seis años como parte del proceso normal de desarrollo, pero el significado de estos cambios no está bien establecido. En este trabajo, los investigadores estudiaron al grupo de niños y adolescentes mediante resonancias magnéticas y descubrieron la relación entre los cambios en el grosor cortical cerebral y los cambios en el desarrollo del coeficiente intelectual. Uno de los resultados principales del trabajo es que una reducción importante de la corteza cerebral se relaciona con una disminución significativa del coeficiente de inteligencia. «Nuestra investigación indica que estas fluctuaciones en el coeficiente de inteligencia también esconden cambios genuinos en la inteligencia, ya que correlacionan con cambios en la estructura cerebral, un resultado que no se debería encontrar si las fluctuaciones fueran espurias o fruto del error de medición, como se había dicho anteriormente», explicó Burgaleta. Según el investigador, «esto tiene implicaciones serias en cuanto al uso social del coeficiente de inteligencia». «Por ejemplo, a la hora de considerar el CI como criterio de admisión o diagnóstico. Aunque, por supuesto, no niega su poder predictivo, que se ha replicado en múltiples ocasiones, en cuanto a rendimiento académico o laboral», añadió el científico. Los resultados de este estudio pueden tener, según Burgaleta, implicaciones «de amplio alcance» en el ámbito pedagógico.

Sustancia gris: Corteza, sistema límbico, cerebelo, tallo encefálico, médula espinal.

Los órganos cerebrales y los circuitos mentales impulsan flujos de información. Las hormonas son los mensajeros químicos.


[1] Primera comunión – no entendía nada – 7 años.

[2] Francia, rugby, ENM, primeros años de universidad – 12 a 21 años.

IDEOLOGÍA (demonio interior)

“Un gran número de personas persiguen un fin que trasciende los fines individuales”

En una ideología el fin es un ideal, un bien supremo, de valor infinito, en consecuencia, cualquiera que se le oponga debe ser de maldad infinita y merecer por tanto un castigo infinito.

Las ideologías son sistemas de creencias que satisfacen varias necesidades psicológicas; tienen una fuerte base motivacional (estado positivo de la mente).

Motivación fuerte: Preservar un estado positivo de la mente para disminuir ansiedad, vergüenza y culpa. Parece ser subyacente al autoengaño, al pensamiento voluntarioso o forzado, al razonamiento motivado. ¿Influye la tolerancia al riesgo?

Requisitos innatos para una ideología ingredientes

  1. La habilidad para razonar con cadenas causales largas. El fin justifica los medios, pensamiento lineal.
  2. Los impulsores del dominio y la venganza (ambos son demonios interiores innatos).
  3. La esencialización de otros grupos.
  4. El círculo elástico de la empatía (solidaridad).
  5. El autoengaño, disonancia cognitiva, ilusión de superioridad moral – brecha moralizadora.

Discurso ideológico

Provee un discurso satisfactorio que explica eventos caóticos y desgracias colectivas ensalzando la virtud y competencia de los creyentes – seguidores – poco sofisticados intelectualmente (demagogia), mientras es suficientemente vago y conspirativo para frenar el escrutinio escéptico.

Sostener abstracciones sin un escrutinio detallado; complejidad integradora insuficiente.

Narcisismo

Si todos estos ingredientes (requisitos innatos) se mezclan en la mente de un narcisista, el resultado puede ser la implantación de un sistema de creencias que resulta en millones de muertes; ideología tóxica.

Hitler – Alemania, Mao – China, Stalin – Rusia, Pol Pot – Camboya, Maduro – Venezuela

Las religiones no tienen este ingrediente (narcisismo) por lo que no serían tóxicas.

Rasgos del narcisista:

  • Ausencia de empatía
  • Necesidad de admiración
  • Convicción de un destino de grandeza

Imprescindibilidad del líder en las ideologías tóxicas. Cuando mueren o son removidos por la fuerza, las matanzas desaparecen (el progreso avanza de funeral en funeral).

El líder es narcisista y cruel, impaciente, y sus motivos son críticos para entender el genocidio (gente mala en el mundo: psicópatas sádicos y déspotas narcisistas).

Violencia ideológica

La violencia es un medio para un fin idealista y, por tanto, justificado.

La violencia ideológica es epidémica: Una ideología tóxica puede desparramarse desde un pequeño número de seguidores narcisistas a toda una población.

La violencia ideológica es una consecuencia de las patologías del pensamiento grupal.

La ideología ha sido el motor de muchas de las peores cosas que las gentes se han hecho unos a otros:

  • Las cruzadas
  • Las guerras europeas de religión
  • La revolución francesa y las guerras napoleónicas
  • Las guerras civiles de Rusia y China
  • La guerra de Vietnam
  • El holocausto de Hitler y los genocidios de Stalin, Mao y Pol Pot.

Ideología: Sistema de creencias[1] aceptadas como verdaderas (y sagradas).

Escenario: Sistema de creencias provisionalmente verdaderas (gobierno de la incertidumbre)[2].

Facultades cognitivas que nos hacen inteligentes

  • Cadena causales abstractas largas
  • Aprender de otras personas
  • Coordinación de comportamientos adhiriendo a normas comunes
  • Trabajo en equipo
  • Sostener abstracciones sin un escrutinio detallado (discurso ideológico)
  • Construcción de una acción de múltiples maneras, con diferentes medios y fines

Lamentablemente las ideologías emergen desde estas mismas facultades.

Las ideologías peligrosas emergen cuando estas facultades caen en combinaciones tóxicas:

  • Alguien teoriza que un bien infinito puede alcanzarse eliminando un grupo demonizado, deshumanizado (Clarín – kirchnerismo).
  • Un grupo de creyentes (conformidad) desparrama la idea castigando a los no creyentes (imposición – Moreno y La Cámpora).
  • Racimos de gente son intimidados (imposición) para endosar la idea (empresarios argentinos).
  • Los escépticos son intimidados o aislados (empresarios o periodistas críticos).
  • Racionalizaciones justifican acciones.

Vacuna anti-ideología tóxica

Con una sociedad abierta en la que las personas y las ideas se mueven libremente y nadie es castigado por hacerlo, incluso aquellas que aparecen como herejías al consenso general. Relativa inmunidad de las democracias modernas cosmopolitas

¿Patologías del pensamiento grupal + narcisistas: ideología tóxica?!!!!!

ignorancia pluralista + imposición: epidemia ideológica

(falsas)

Pensamiento grupal

  1. Decir a los líderes lo que estos quieren oír
  2. Eliminar el disenso
  3. Censurar las dudas privadas
  4. Borrar las evidencias

Patologías del pensamiento grupal

  1. Polarización:

Las opiniones tienden a parecerse cada vez más.

  • Embotamiento:

Decir a los líderes lo que estos quieren oír

Eliminar el disenso

Censurar las dudas privadas

Borrar las evidencias

  • Animosidad (entre grupos)

Identidad grupal

Deseo de ser aceptado por el grupo

Promover el éxito del grupo

El comportamiento de los miembros de un grupo depende de su entorno social inmediato (proximidad física, trabajo en tándem o grupal)

Las personas moralizan la conformidad y la obediencia, por lo que hacen cosas que van en contra de sus propias inclinaciones si las entienden como parte de un proyecto legítimo en su sociedad (observancia forzada falsa y conformidad falsa).

La conformidad no es inherentemente irracional. Algunas normas sociales son meramente juegos de coordinación, pero la mayoría de las normas tienen un  contenido moral. La moralidad consiste en respetar o no alguno de los modelos de relación.


[1] Creencias políticas, Sam Harris

[2] Creencias políticas y no políticas, Sam Harris

THE MORAL LANDSCAPE – SAM HARRIS

Las ideologías son sistemas de creencias que satisfacen varias necesidades psicológicas; tienen una fuerte base motivacional. Siempre hay emociones primarias positivas asociadas a las creencias.

Motivación: preservar un estado positivo de la mente para disminuir ansiedad, vergüenza y culpa. Parece ser subyacente al autoengaño y al pensamiento voluntarioso o forzado (razonamiento motivado).

La ciencia nos permite, de manera incremental, identificar aspectos o rasgos abstractos de la realidad que hacen que nos desviemos de las normas habituales del razonamiento factual y moral, normas que, cuando se explicitan, son en general reconocidas como válidas por todo el mundo.

Los conservadores se caracterizan por

  1. Su incomodidad general con los cambios sociales.
  2. Aceptar fácilmente la inequidad social, como algo inevitable inherente a la realidad (un aspecto abstracto de la realidad). Es la Visión Trágica.

Factores subyacentes a estas características con correlación positiva:

  • Dogmatismo
  • Inflexibilidad
  • Ansiedad por la muerte
  • Necesidad de cierre – de clausura operativa – aversión a la incertidumbre

Factores subyacentes a estas características con correlación negativa:

  • Apertura a experiencias y valores nuevos – la mente que no duda no crece
  • Complejidad cognitiva (CI)
  • Autoestima
  • Estabilidad social

Los liberales clásicos se caracterizan por:

  1. Autonomía y bienestar individual antes que tribu, autoridad y tradición (comunidad, autoridad y pureza).
  2. Más sesgados por el racismo.

Sesgos de razonamiento

No dejarse arrastrar por los impulsos irracionales. Algunos motores de los impulsos:

Ansiedad:

Personal – descarte miope

De otros miembros de la empresa

De los clientes (evitar importar su desorden)

  • Sesgos sistemáticos de razonamiento que forman parte de nuestra naturaleza:

Pensamiento voluntarioso – forzado: Argumentar solo para sostener una idea preconcebida.

Autointerés: Argumentar solo para favorecer mis intereses o expectativas, o los de mi grupo.

Autoengaño: Resolver una disonancia cognitiva ocultándole a los demás y a sí mismo la propia inconsistencia o contradicción. El mejor mentiroso es el que se cree sus propias mentiras.

  • Lealtades grupales – identidad

Las personas moralizan la conformidad y la obediencia cuando forman parte de un grupo de interés (identidad grupal) y consideran legítimos los objetivos del grupo.

PLANIFICACIÓN Y SEGUIMIENTO DE PROYECTOS

Introducción

El diseño de un producto nuevo y de su proceso es, básicamente, un flujo de creación de conocimiento, pero ese conocimiento debe ser “conocimiento útil” para ser considerado valor agregado en el desarrollo. A ese flujo de conocimiento útil, o proceso de aprendizaje, se lo denomina “flujo de valor de desarrollo” y sus salidas son el diseño del producto, con sus características, y el diseño del proceso. Este último conforma el “flujo de valor operativo”, cuyo valor agregado es el material transformado. El flujo de valor operativo o proceso debe ser rentable y consistente.

Así, tenemos un sistema de desarrollo cuyo cliente principal es el proceso operativo, y un sistema de producción, cuyo cliente principal es el cliente propiamente dicho; el cliente compra productos, no compra ni desarrollo ni proceso.

Como todo flujo, el flujo de desarrollo debe ser continuo y su “lead time” debe ser corto. La reducción del lead time de desarrollo se basa en la eliminación de los desperdicios de desarrollo, que permite obtener el conocimiento correcto, en el lugar y el momento correctos.

Conocimiento

El conocimiento se crea de tres modos básicos:

  1. Enterándose del estado de cosas ahora, para integrarlas al diseño. Incluye aprender acerca de los clientes, los proveedores, el ambiente donde se usará el producto, etc. Ayuda a integrar el diseño con las necesidades de otros.
  2. Inventando, para crear soluciones nuevas posibles.
  3. Evaluando la factibilidad de las soluciones, para tomar mejores decisiones a partir de distintas opciones.

El conocimiento puede clasificarse en dos tipos:

  1. Un primer tipo es el conocimiento a priori o necesario, aquel que, por ejemplo, disponen las funciones de apoyo especializadas como ingeniería, administración, recursos humanos, calidad o mantenimiento, y que, en general, conforman el núcleo duro de todas las organizaciones y es independiente del “corebusiness”. También es conocimiento a priori el documentado en políticas, planes y procedimientos, así como los resultados reales de éstos que permiten tomar las decisiones tácticas. Se denomina conocimiento a priori porque debe estar disponible de antemano para cuando sea necesario sin necesidad de recurrir a alguien más.
  2. Un segundo tipo es el conocimiento a posteriori o contingente, aquella información relevante para el producto o el proceso en foco, y que surge en el momento como fruto de la interacción con los componentes del entorno inmediato, pero que no puede ser anticipada. Este tipo de conocimiento fluye por el canal de comando promoviendo instrucciones hacia abajo, demandas hacia arriba y negociaciones entre ambos niveles.

El ciclo de creación de conocimiento:

El ciclo de creación (ciclo de agregado de valor) se despliega en seis fases, todas igualmente importantes.

  1. Observar:

Comportamiento del cliente, productos competitivos, procesos, proveedores, nuevas tecnologías, naturaleza, etc.

  • Inventar:

Innovar a partir de lo aprendido de la observación.

  • Probar:

Simular, testear lo inventado.

  • Abstraer:

Explicitar el conocimiento adquirido en formas útiles, compactas y comprensibles.

  • Conectar con la teoría:

Asociar con la teoría ya existente.

  • Enseñar:

Transferir lo aprendido a otros.

Desperdicios en el sistema de desarrollo

En su libro “Lean Product and Process Development”, Allen Ward distingue tres categorías de desperdicios:

  1. Las interrupciones del flujo de conocimiento útil
  2. La gestión del conocimiento inútil
  3. El pensamiento voluntarioso en la toma de decisiones
  4. Las interrupciones del flujo de conocimiento útil:

Son acciones que hacen inefectivo el conocimiento interrumpiendo su flujo; básicamente interrumpiendo las interacciones sutiles del equipo de trabajo.

Dos categorías asociadas a esta categoría de desperdicio son la existencia de barreras en la comunicación y la utilización de herramientas pobres tales como procedimientos excesivamente detallados, útiles quizás en su momento.

Las barreras en las comunicaciones son típicas de las organizaciones donde la gestión por procesos es débil, prevaleciendo la gestión por departamentos con la consecuencia negativa de priorizar los resultados divisionales por encima de los del conjunto. El proceso de desarrollo no se percibe como un proceso integrador, capaz de lograr los objetivos estratégicos de la organización.

Los procedimientos se empobrecen con el correr del tiempo y de los proyectos de desarrollo. Cuando los proyectos se atrasan, la reacción natural de los responsables últimos, impulsados por una falsa ilusión de control, es solicitar más informes, poner más controles, más controles cruzados, etc., siendo la consecuencia inevitable desarrolladores más ocupados y, sin dudas, un proyecto que se atrasa aún más. Entonces se piden más informes y controles. Los desarrolladores, a su vez, toman atajos para poder cumplir con los plazos degradando la calidad del proyecto, con lo que se dispara una espiral de la muerte. Todo esto se traslada a los procedimientos que no reflejarán adecuadamente la realidad de los proyectos futuros.

Lo que realmente sucede es que estos procedimientos ignoran la diferencia entre conocimiento a priori y conocimiento a posteriori. El conocimiento a posteriori sobre el desarrollo del proyecto se crea en el momento, es inmediato, por lo que solo pueden alcanzarlo los desarrolladores. El conocimiento a posteriori no puede anticiparse, por lo que no cabe que un procedimiento pretenda contemplar cosas que es imposible que se conozcan de antemano. El resultado es el colapso del sistema de desarrollo, de los responsables del proyecto con los desarrolladores.

  • La gestión de conocimiento inútil:

El conocimiento inútil se genera por la separación artificial de conocimiento, responsabilidad, feedback y ejecución en el desarrollo de un proyecto, producida por su asignación a diferentes personas. Ese conocimiento inútil se incorpora al flujo de desarrollo haciendo su gestión inevitable, con el consecuente desperdicio de tiempo y esfuerzo.

La separación de conocimiento, responsabilidad, feedback y ejecución, en el desarrollo de un proyecto, se debe a la ausencia de un líder de proyecto con autoridad y responsabilidad para lograr un sistema de desarrollo integrador, y a quién los responsables departamentales deben dar apoyo.

El secuenciado de las actividades de desarrollo también genera conocimiento inútil, dado que cada actividad no se inicia hasta que la anterior se haya finalizado, no se solapan pese a que el trabajo en los proyectos de desarrollo lo permite; es más, lo exige a fin de evitar los desvíos y sus consecuentes revisiones por desconocer las necesidades de la actividad siguiente, con las demoras que esto implica. A diferencia de los productos físicos que solo pueden estar en un solo lugar a la vez, el conocimiento puede ser compartido por muchas personas permitiendo que las actividades se solapen.

  • El pensamiento voluntarioso en la toma de decisiones:

Es una consecuencia de la necesidad de tomar decisiones bajo la presión de los vencimientos de plazos, sin la suficiente información útil y en medio del ruido que genera el exceso de información inútil.

Mucho conocimiento se ha perdido por no saber cómo convertir datos en conocimiento útil. No se dispone de una estrategia de “lecciones aprendidas”.

Otro aspecto del pensamiento voluntarioso es que las pruebas de las especificaciones las realizan los mismos ingenieros del proyecto. Al no ser independientes aparece un sesgo natural hacia lo que conviene.

Principios guía para el diseño de un sistema de desarrollo

En su libro “Lean Product and Process Development”, Allen Ward enuncia los siguientes principios que guían el diseño de un sistema de desarrollo:

  1. Poner el foco en la creación de conocimiento y hardware nuevos para flujos de valor operativo rentables y consistentes.

Producción es el cliente principal de desarrollo, siendo el valor primordial del desarrollo el conocimiento útil.

Diseño de un sistema de producción:

  • La innovación en producción es tan importante como la innovación en los productos y es más fácil de mantener en secreto, sosteniendo por más tiempo la ventaja competitiva.
  • Asignar los ingenieros de proceso al proyecto desde el inicio ya que, en general, los productos se diseñan para un sistema de producción existente.
  • Cerrar el bucle entre diseñar y hacer. Los operadores, los líderes de equipos y el personal de mantenimiento son la autoridad última en relación a como se usan y mantienen los equipos, por lo que deben ser asignados al proyecto desde el inicio.
  • Intentar diseñar y construir el herramental íntimamente ligado con las partes y conjuntos que se producirán.
  • Diseñar el sistema de producción teniendo en cuenta los desperdicios de Ohno Taiichi (muda).
  • Integrar la construcción y prueba del equipamiento al proceso de desarrollo, si es posible.
  • Designar como líder de proyecto a un diseñador de sistema emprendedor

El líder del proyecto debe diseñar un sistema, es decir, un flujo de valor operativo que corra desde los proveedores a través de manufactura hasta llegar al cliente, pasando por las características del producto. Son responsables de ensamblar en un conjunto todas las partes del flujo de valor operativo, ya que optimizar cada una de éstas independientemente, sin tener en cuenta todo el flujo, resulta siempre en un mal sistema.

Pero además, deben ser emprendedores, es decir, deben reunir habilidades tanto técnicas y de gestión como de negocios, y tener un contagioso entusiasmo. No son burócratas sino básicamente emprendedores.

Responden directamente a los número uno, y deben tener el apoyo de los responsables funcionales o departamentales. La tensión que esta forma de organización indefectiblemente genera es la fuente de la creatividad; a decir de un ingeniero jefe de Toyota, “montones de conflictos hacen un  gran auto” (Allen Ward  en  su libro “Lean Product and Process Development”).

Los diseñadores de sistema emprendedores son responsables de:

  • La rentabilidad y el riesgo del proyecto
  • Representar al cliente
  • Proveer la visión
  • Negociar recursos
  • Diseñar el flujo de valor evitando desperdicios
  • Proveer liderazgo técnico
  • Activar el proceso de desarrollo del proyecto
  • Hacer el seguimiento del proyecto
  • Implementar una ingeniería concurrente basada en múltiples alternativas (SBCE – Set – Based Concurrent Engineering)

Se trabaja, en el inicio del proyecto, en múltiples alternativas, simultáneamente y en todos los niveles de la organización. Se trata de gastar al principio en más alternativas de las que se van a usar, pero descartando las más débiles agresiva y rápidamente.

Una red de comunicaciones, la gestión a la vista y las interacciones cara a cara son también ingredientes esenciales.

Esta estrategia disminuye sensiblemente la gestión de conocimiento inútil en gran parte del proyecto, reduciendo su lead time.

  • Implementar un flujo cadencioso y la gestión por arrastre del proyecto.

Los nuevos proyectos se liberan a un ritmo regular de manera de nivelar la carga de trabajo de los desarrolladores (cadencia).

Se planifican eventos integradores (3 a 10 por proyecto) que funcionan como mojones para los desarrolladores, quienes planifican su propio trabajo basándose en ellos y esforzándose por alcanzarlos (sistema de arrastre).

Los eventos indican plazos estratégicos que no pueden modificarse, no hay excusas.

  • Equipo de expertos con autonomía.
  • Los expertos son los desarrolladores, que pueden pertenecer a diferentes departamentos.
  • Responden al líder del proyecto, en relación con ese proyecto en particular, es su cliente.
  • Reciben apoyo de los líderes de sus propios departamentos.
  • Planifican su propio trabajo para alcanzar cada evento integrador (sistema de arrastre).
  • Aprenden del conflicto que surge de la natural y útil tensión producto de la interacción con el líder del proyecto.

Ingeniería concurrente (punto 3)

  1. Desplegar el sistema en subsistemas y sub-subsistemas

Estructura de producto: las jerarquías reducen variedad permitiendo hacer un uso infinito de recursos finitos.

  • Identificar objetivos de límites amplios para cada ítem del punto 1
  • Crear múltiples conceptos para cada artículo y su respectivo proceso
  • Evaluar agresivamente identificando sus modos y puntos de falla

Producir trade-off curves para cada modo de falla de cada artículo. Describen los límites de performance o posibilidades del artículo.

Muy útiles para diseños futuros.

Considerar:

  • Integración de la parte con el todo
  • Necesidades de los clientes
  • Productos competitivos
  • Crear una base de conocimientos con las hojas de las trade-off curve

Armar libros por especialidad con las hojas trade-off curve. Recordar: hacer un uso infinito de recursos finitos.

  • Filtrar los múltiples conceptos

El filtrado permite incrementar la precisión, el detalle y los costos de cada modelo conceptual y de sus pruebas.

  • Ciclos cortos y rápidos

Reuniones que proveen un orden dinámico – una por semana, a veces una diaria.

Los ciclos deben se cortos para evitar que cada situación sea significativamente nueva.

Trade-off curve

Es una hoja A3 (o dos enfrentadas) que muestra esquemáticamente los límites de performance o de posibilidades de un sistema, un subsistema o un sub-subsistema:

  • Es el registro primario de los modos de falla
  • El más común de los modos de falla sea probablemente el ensamblado de conjuntos
  • Los puntos de falla deben caer cómodamente dentro de las condiciones operativas. Prevención de fallas de campo.

El estado de derecho incierto

En un experimento reciente, los economistas Benedeikt Herrmann, Christian Thöni y Simon Gächter hicieron que estudiantes de dieciséis países participaran en una versión del dilema del prisionero, llamado el juego de los bienes públicos. En este juego los participantes aportan dinero a un fondo que luego los organizadores duplican y distribuyen entre todos los participantes por partes iguales, teniendo éstos últimos la posibilidad o no de castigarse entre sí. El resultado óptimo para el grupo es que cada participante aporte lo máximo posible, en cambio, el resultado óptimo para el  individuo es amarretear su aporte sacando provecho a costa del resto. En este último caso, el resultado es que las contribuciones disminuirán gradualmente hasta llegar a cero. El grupo pierde. Pero si los participantes tienen la posibilidad de vengarse castigando a los abusadores, estos últimos tendrían la posibilidad de arrepentirse y mejorar sus aportes. El grupo gana, todos ganan al mismo tiempo.

En el caso particular de este experimento, con jugadores de muchos países del mundo, los resultados fueron muy llamativos. En algunos países muchos participantes castigaban más a los buenos contribuyentes que a los abusadores, empujando, con sus acciones de resentimiento aparentemente motivadas por un exceso de venganza, a que todos terminen siendo abusadores. Además estos jugadores antisociales cuando eran castigados, en lugar de incrementar sus aportes en la siguiente ronda, castigaban a su vez a sus castigadores, que solían ser los buenos contribuyentes. En este experimento los jugadores antisociales mencionados pertenecían a Rusia, Ucrania, Grecia, Arabia Saudita y Omán. En cambio, los abusadores que sí se arrepentían y entonces mejoraban sus contribuciones pertenecían a Europa Occidental, Australia, China y Estados Unidos.

¿Qué distingue a estos dos grupos de países?

Los investigadores realizaron estudios de regresión múltiple usando un conjunto de rasgos de los diferentes países, tomados de estadísticas económicas y de estudios internacionales. “El resultado fue que un importante pronosticador del exceso de venganza que motivaba a los abusadores eran las normas cívicas: una medida del grado en que la gente cree que está bien hacer trampas con los impuestos, reclamar prestaciones a las que no se tiene derecho o eludir a los cobradores en el tren. Los científicos sociales creen que las normas cívicas constituyen gran parte del capital social de un país, más importante para su prosperidad que sus recursos físicos”.

¿De dónde provienen las normas cívicas?

El Banco Mundial asigna a los países una puntuación denominada estado de derecho, que “refleja hasta qué punto se pueden hacer valer los contratos privados en tribunales, si existe la percepción de un sistema judicial justo, cuál es la importancia del mercado negro y del crimen organizado, cuál la calidad de la policía y qué probabilidad hay de crimen y violencia”[1].

En el experimento el estado de derecho pronosticaba considerablemente el grado en que los ciudadanos se permitían la venganza antisocial: “las personas de los países con un estado de derecho incierto eran vengativas de una manera más destructiva”. Sus acciones eran de resentimiento: “castigan a los donantes generosos más que a los tacaños (malos contribuyentes) y cuando son castigados, no se arrepienten, arremeten con más resentimiento”. Son castigadores antisociales, en el sentido de perjudicar a la sociedad decente.

El fenómeno del resentimiento en la raíz de la corrupción y la coima

El resentimiento es una combinación tóxica de nacionalismo y narcisismo que puede observarse en la Rusia de hoy, en el fundamentalismo islámico y también en la Alemania nazi de otrora.

A decir de Steven Pinker “el nacionalismo se puede entender como una interacción entre la psicología y la historia. Es el resultado de la soldadura de tres elementos: el impulso irracional del tribalismo; una concepción cognitiva del grupo como pueblo que comparte lengua, territorio y antepasados; y el aparato político del gobierno”.

El nacionalismo no siempre es algo preocupante, pero si se combina con el narcisismo, el equivalente social del narcisismo individual psiquiátrico (carencia de empatía, necesidad de admiración y fantasías de éxito, poder, bondad y brillantez sin límite), las cosas se complican. El resultado de esta combinación es lo que los científicos políticos denominan resentimiento y lo definen como “la convicción de que la nación o civilización de uno tiene un derecho histórico a la grandeza pese a su estatus modesto, lo que solo se puede explicar recurriendo a la malevolencia de un enemigo interno o externo”. El resentimiento parece ser motivado por un deseo de venganza excesivo y dispara “las emociones de dominación frustrada a las que son propensos los narcisistas: humillación, envidia y furia”.

Hipótesis

¿Qué resultado hubieran obtenido en este experimento jugadores argentinos? Imagino que probablemente hubiera salido a la luz el resentimiento. En Argentina ¿acaso no padecemos mayormente la combinación tóxica nacionalismo -narcisismo?

A algunas pruebas me remito:

Susana Malcorra[2]: “los argentinos tenemos una obsesión por ver a todos girando alrededor nuestro”.

Decir de los políticos en general: “…el país que nos merecemos”.

Enrique Valiente Noailles[3]: “Messi, un conjuro contra la frustración argentina: al crack se lo ha acusado de escatimar esfuerzos y no dar todo lo que puede, características que podrían aplicarse al país que lo juzga y que, creyéndose predestinado al éxito, no puede soportar la derrota”.

Chiste popular global: “el brillante negocio de comprar un argentino por lo que vale y venderlo por lo que cree que vale”.

¿Acaso la gente no cree que está bien hacer trampas con los impuestos, reclamar prestaciones a las que no se tiene derecho o eludir a los cobradores en el tren?

Un atolladero para las empresas

Una empresa es un elemento más dentro de un sistema socio-económico muy complejo que el empresario no puede controlar directamente. En su nivel o plano jerárquico de operaciones, las coimas son parte de las reglas de juego impuestas por un gobierno corrupto (un “gobierno de mierda” en una sociedad con resentimiento) parado en un nivel jerárquico superior[4]. Reglas que parecen insalvables para el empresario si aspira a la supervivencia, al menos en el mediano plazo. El martirio aislado del empresario utópico y terco por no entender en qué nivel jerárquico se está moviendo parece inconducente. O todos optan por abandonar las malas prácticas al mismo tiempo o nadie lo hace.

¿Cómo podría ser una salida de este atolladero?

Podemos abordar el incómodo y no ético problema de coimas y funcionarios corruptos, instalado como práctica habitual, adoptando simultáneamente dos posturas, cada una asociada a uno de los niveles jerárquicos mencionados: el del empresario, y el superior del sistema en el que éste opera regulado mayormente por el estado.

Postura operativa utilitaria (de supervivencia):

Asumir que las afirmaciones como la gente cree que está bien hacer trampas con los impuestos, reclamar prestaciones a las que no se tiene derecho o eludir a los cobradores en el tren (normas cívicas instaladas) son, en el escenario actual y en el nivel jerárquico de operaciones del empresario, provisionalmente verdaderas, y evitar el martirio o suicidio inconducente.

(No creo que todos los valores sean necesariamente sagrados en todos los niveles jerárquicos que conforman el entramado social, a veces, en alguno de ellos y en determinado momento de la historia, podrían ser solo pseudo-sagrados, lo que nos permitiría seguir temporalmente con nuestros asuntos).

Postura ética estratégica (de no conformidad con las normas indecentes vigentes, y de imposición de  cambios):

A la luz de un escenario futuro decente, asumir el firme compromiso de revisar las políticas corporativas sobre el tema.

En caso contrario, promover el cambio en el nivel jerárquico superior (sistema imperante) a través de la introspección y la reflexión,  del debate con otros empresarios en cámaras, congresos, exposiciones, o simplemente privadas, auspiciando investigaciones y estudios sobre el tema, de la presencia activa en partidos políticos, y, fundamentalmente, instalándolo en la educación en busca de una ciudadanía más sofisticada intelectualmente que sea capaz de entender lo que nos pasa y, a la larga, lograr que las normas cívicas decentes se plasmen como una segunda naturaleza.

Esta doble postura quizás tenga algún paralelo con la ética de Max Weber, responsabilidad versus principios:

Votar con responsabilidad (utilitario): evitar un mal mayor.

Votar por principios (convicción): cuando el riesgo de un gran mal es bajo.

Por último, un eufemismo al que las empresas podrían recurrir para referirse a las coimas en la Argentina sin sonrojarse demasiado sería “contribuciones informales”.

[1] Todos los pasajes entre comillas fueron tomados textualmente del libro “Los ángeles que llevamos dentro” de Steven Pinker, 2012, PAIDÓS.

[2] Susana Malcorra, canciller de Argentina.

[3] Enrique Valiente Noallies, periodista de La Nación.

[4] Adrián Werthein, líder del Consejo Interamericano de Comercio y Producción (Cicyp:) «Somos hijos de tiempos en que el apego a la ley no estaba sobre nuestro escenario. Muchos de los ministros del gobierno anterior no tuvieron apego a la ley. Más que currículum, tienen prontuarios. Debimos haber sido menos permisivos. A veces fuimos permisivos, a veces indolentes y a veces, conniventes».

Enfoque de sistema para la gestión – Parte 1

El arte de la política

El discurso político

Gobierno de la incertidumbre

El fenómeno del cambio

El cambio es un tema de preocupación por estos días en la Argentina, en particular el cambio social. Entender el fenómeno del cambio es esencial para entender la dinámica de la realidad, no sólo de la realidad social sino también la de su predecesora, la realidad biológica.

Las organizaciones humanas son sistemas complejos y probabilísticos en el sentido de no lineales; sus cadenas causales son ininteligibles. Ante una perturbación o fluctuación externa o interna, de cualquier tipo, el sistema no lineal tiene más de una opción como respuesta y quién decide cuál es el azar. Como contrapartida los sistemas simples y deterministas tienen una sola salida posible, permiten la anticipación; sus cadenas causales son inteligibles. Gestionar un sistema no lineal, y como caso particular una organización social, es más ocuparse de las relaciones que de los elementos que lo componen; las primeras son las responsables de la proliferación de variedad (número de estados posibles de un sistema) o avalancha de interacciones, despliegan complejidad espacio – temporal. Qué relaciones se permiten y cuáles no, y con qué criterios, es el núcleo de la gestión. Un sistema no es otra cosa que variedad restringida, no todo tiene que interactuar con todo (estructura por departamentos) y, además, puede hacerse un uso infinito de recursos finitos (estructura jerárquica).

En sistemas no lineales los procesos de cambio involucran tanto fuerzas o factores internos como fuerzas o factores externos.

Entre los factores internos intrínsecos que caracterizan a las organizaciones humanas están las leyes estocásticas, como la normal, binomial, poisson, de potencia, etc., y las leyes que rigen el mundo social con su centro de gravedad en la naturaleza humana, especialmente en la mente humana. Hay recursos cognitivos y emocionales a identificar que hacen el aprender y el cambio posibles, y hay placeres y penurias a reconocer que los hacen deseables.

Entre los factores o anclajes externos construidos ex profeso pueden incluirse las instituciones, las leyes y normas, los mecanismos que facilitan el intercambio de perspectivas, la sofisticación intelectual, el flujo esbelto total de realización y la planificación estratégica, entre otros.

Es importante, además, resaltar las características de calidad que deben reunir los sistemas no lineales: Deben ser robustos, redundantes y reverberativos.

Gestionar un cambio en un sistema no lineal significa definir y construir los factores externos (anclajes) que impulsen a los factores internos, identificados como críticos para el progreso del sistema, en una dirección deseada. Esto permite que emerja el fenómeno de la homeóstasis que se da cuando numerosas partes y propiedades actúan al unísono manteniendo el sistema estable. Entonces las fluctuaciones remiten, los procesos se estabilizan y el azar es controlado. No es posible lograr un cambio actuando directamente sobre efectos no deseados. También parece inviable hacerlo desmenuzando las complejas e ininteligibles redes de cadenas causales en busca de alguna causa raíz.

La identificación de los factores internos críticos exige consensuar previamente una visión de progreso del sistema: “Hay progreso cuando sucede tal cosa”. Establecidos la visión y los factores internos críticos es posible identificar los anclajes a imponer desde el exterior que impulsen al sistema hacia el estado deseado.

Es mandatorio que todos los factores internos críticos sean fijados secuencialmente mediante los anclajes externos. La necesidad del secuenciado se relaciona con develar los obstáculos no anticipables de uno en uno para no crear un ruido ininteligible. No es posible definir qué hacer, hay que descubrir qué hacer. Una vez finalizado el proceso de anclaje el sistema evolucionará hacia el nuevo estado estacionario deseado. Un estado estacionario es aquel en el que las variables macro del sistema se hacen independientes del tiempo, se estabilizan aunque solo provisionalmente. No hacerlo significaría intentar violar un rasgo abstracto de la realidad y por lo tanto condenar el cambio al fracaso. La realidad es crudamente inflexible.

Ese rasgo, explicitado y explicado por la teoría de los juegos, es lo que se conoce como “juego de suma positiva”: Es un escenario en el que todos los factores internos críticos tienen opciones capaces de mejorar la suerte de todos al mismo tiempo.

El estado estacionario alcanzado es provisional, no eterno, lo que obliga a su continuo monitoreo a fin de detectar fluctuaciones que se resisten a remitir. Entonces el proceso de cambio deberá reiniciarse en busca de un nuevo estado estacionario.

Confianza: “Esperanza firme o seguridad que se tiene en que una persona va a actuar o una cosa va a funcionar como se desea” (diccionario).

La confianza es un estado cognitivo y emocional de la mente de un individuo que se configura cuando interactúa con otro individuo o cosa determinados y se construye a partir de la acumulación de interacciones exitosas. El ser humano tiene un talento innato para la cooperación que lo lleva a interactuar con otros y le permite manipular  el mundo social. Es el reino del Derecho.

El talento para el uso de herramientas le permite a su vez manipular el mundo físico. Es el reino de la Ingeniería.

Dos talentos que junto con el lenguaje ponen a los humanos en ventaja, hoy evidente, en relación con las otras especies.

La cooperación, junto con las emociones sociales que la sustentan, evolucionó para permitirles a las personas salir airosas de las contiendas estratégicas. Todas las especies en su camino evolutivo han tenido que forcejear con regularidades concretas del mundo físico en el que están inmersas como la gravedad, el electromagnetismo o las leyes de la física y la química, pero también con regularidades abstractas como la lógica, la geometría o la matemática, que existen más allá de la psicología de quienes las experimentan.

Una de las regularidades abstractas que atañen a la cooperación es una rama de la matemática conocida como teoría de los juegos con su icónico dilema del prisionero (o de la cooperación o del pacifista). El dilema del prisionero captura la tragedia de la vida social de manera sucinta: Si el juego es de un solo tiro (una sola interacción) la tragedia es doble ya que resulta irracional cooperar y el costo para la víctima es muchísimo mayor que el costo para el agresor. Es un juego de suma cero: Se gana o se pierde.

En cambio si el juego es iterativo (acumulación de interacciones) se ajusta más a la realidad y facilita la construcción de confianza, aunque puede ser vulnerable al error y los malos entendidos y también víctima del autoengaño y de la ilusión de superioridad moral. Es un juego de suma positiva: Un escenario en el que todos los agentes tienen opciones capaces de mejorar la suerte de todos al mismo tiempo. Zafar del dilema quizá es solo cuestión de un poco de buena voluntad.

Otra de las regularidades abstractas que atañen a la cooperación es la intercambiabilidad de perspectivas o de puntos de vista: Todas las perspectivas son válidas siempre y cuando no entren en conflicto con la ciencia, el saber práctico validado o los hechos. Es esta regularidad, explicitada y explicada por la razón y la ciencia, la que nos impulsa en la dirección de la cooperación, es la responsable de la dirección no aleatoria de la historia de los hombres hacia la humanidad y el progreso.

La teoría de los juegos y la intercambiabilidad de perspectivas, junto con la teoría de sistemas, los modelos de relación social y la ciencia en general, incrementan la capacidad de razonamiento abstracto de las personas. Está científicamente comprobado que existe una correlación positiva significativa entre sofisticación intelectual y cooperación y no violencia.

La confianza se cimenta en la cooperación recurrente exitosa.

La diferencia de competitividad con otros países es uno de los factores determinantes de la inflación y, quizá, el menos considerado. Se escucha hablar sobre todo de déficit fiscal, cultura inflacionaria y escasez de inversiones, pero casi nada de la influencia de la competitividad.

Cuando la diferencia de competitividad es significativa el comercio internacional se dificulta: El precio del mercado internacional no cubre los costos locales; los dirigentes presionan por una devaluación del tipo de cambio; ésta bien sabemos impulsa la inflación; y como resultado final la ciudadanía se empobrece un poco más cada vez. La inflación resulta así la variable de ajuste de la diferencia de competitividad entre países y la paga toda la ciudadanía sin que, quizá, su esfuerzo sea alguna vez reconocido.

La “Convertibilidad” fue un intento por morigerar la inflación apuntando a desactivar la cultura inflacionaria y a impulsar la mejora de la competitividad. Para ello fijó el tipo de cambio, 1 a 1 con el dólar: El valor del peso se hacía predecible para la ciudadanía y la posibilidad de utilizar la inflación como variable de ajuste se eliminaba. Esto último pretendía que la dirigencia política y empresarial no tuviera otra salida que ponerse a trabajar sobre la competitividad y la productividad para sobrevivir. Nada se logró y encima no se acompañó a Brasil con la devaluación, el principal socio comercial.

¿Por qué no funcionó?  Podemos extraer algunas conclusiones recurriendo a una de las prácticas de liderazgo de Toyota: La “rutina para la adaptación y mejora continua”.

En su momento el gobierno actuó en modo “implementación”. Asumió que el camino hacia la convertibilidad era directo, completamente conocido, solo certezas (yo sé) y aplicó la convertibilidad sin más. Pero los efectos esperados nunca llegaron.

La rutina mencionada, en cambio, actúa en modo “implantación”. Asume que el camino hacia su objetivo no es directo, es brumoso, incompletamente conocido y plagado de incertidumbres (yo no sé). Ante esta inconmensurable complejidad, la rutina propone avanzar hacia el objetivo (la convertibilidad) por etapas sucesivas, manteniendo así la integridad del sistema a lo largo del camino.

Cada etapa queda definida por una circunstancia que debe darse a priori, por una condición necesaria a satisfacer previamente, a fin de alcanzar el objetivo. Cada condición debe percibirse como lograble con los recursos disponibles en el contexto actual, un desafío que la sociedad muy probablemente estaría dispuesta a asumir.

Pero lo más importante: Al intentar implementar una condición, ésta develará una serie de obstáculos no predecibles de antemano. Es sobre estos obstáculos que debe trabajarse, ellos son la fuente de la solución.

Hoy, ya pasados casi treinta años, algunas de las condiciones previas necesarias parecen casi obvias: Una economía abierta, una estructura de impuestos que incentive la inversión, un capital social que viabilice la gestión tanto pública como privada, un estado de derecho cierto y partidos políticos capaces de imaginar nuevas ideas que reemplacen las viejas que no dieron resultado.

También hoy, gracias al avance del conocimiento, pueden intuirse algunos de los obstáculos que hubieran salido a la luz al intentar implementar las condiciones enumeradas: Ante la economía abierta, un nacionalismo desmedido; ante la estructura de impuestos que estimula la inversión, un abultado déficit fiscal grande; ante el capital social que viabiliza la gestión, una deficiente sofisticación intelectual de la población en general; ante el estado de derecho cierto, un resentimiento argentino fruto de una tóxica combinación de nacionalismo y narcisismo social; y ante los partidos políticos capaces de generar ideas nuevas, unos partidos políticos endogámicos y cerrados a nuevas ideas y valores.

La clave de este enfoque de dirección pasa por la posibilidad de develar la fuente de la solución: Los obstáculos ocultos sobre los que se debe trabajar en concreto.

No se trata de pensar qué podemos hacer, se trata de descubrir qué debemos hacer.

¿Qué es la competitividad?

A decir del Foro Económico Mundial es “el conjunto de instituciones, políticas y factores que determinan el nivel de productividad de un país”. Es una orientación económica centrada en la productividad: Hay progreso cuando crece la economía.

Un segundo enfoque de la competitividad es considerar hasta qué punto promueve el bienestar y la autonomía de las personas. Es  una orientación humanista, centrada en las personas: Hay progreso cuando mejora el bienestar general de las personas y se incrementa su autonomía.

La productividad, más específicamente, mide la relación producción / recursos.

Si bien la sociedad y el gobierno son actores relevantes, las empresas, tanto públicas como privadas, juegan un rol clave en las cuestiones de productividad en su actividad, pero también lo juegan en las cuestiones de competitividad económica global del país en el que operan.

En el primer caso, el de la productividad, las empresas tienen una responsabilidad social de gestión: Deben mejorar de manera continua y sistemática la relación producción / recursos. Para ello, y para que el impacto sea real, deben centrarse en el flujo total de realización – incluye los proveedores de todos los anillos – para tomar decisiones o entender un problema. Para el abordaje del flujo total de realización es recomendable recurrir a los conceptos y herramientas del sistema de producción de Toyota y al enfoque de sistema para la gestión, entre otros.

En el segundo caso, el de la competitividad económica, las empresas tienen una responsabilidad social: Deben involucrare en las cámaras de manera continua y sistemática para alcanzar una comprensión compartida del contexto y del mundo e impulsar así mejoras en la infraestructura y en las políticas que afectan al sector y a la competitividad económica en general.

El segundo enfoque de la competitividad, el humanista, surge cuando las metas máximas de la sociedad son la educación, la salud, la seguridad y la vejez, y no el mercado que es desplazado a un segundo nivel. Este segundo enfoque significa  considerar cómo la competitividad promueve el bienestar y la autonomía de las personas, significa no fundamentar el sistema político en cifras de producción únicamente ya que hacerlo llevaría a trasladar el valor de la vida a una planilla de cálculo, y significa que el gobierno debería subvencionar las áreas donde la productividad no puede potenciarse, como es el caso de las cuatro ya mencionadas.

Ambos enfoques son válidos y están jerárquicamente entrelazados: La competitividad económica subordinada a la humanista. La clave es distinguir en qué áreas el mercado resuelve cosas genuinamente.